Un seguro de hogar tiene como principal objetivo cubrir los daños que pueda sufrir una vivienda y/o su contenido, así como los daños que se puedan ocasionar a terceros. A continuación, explicamos algunas de las principales coberturas que ofrecen los seguros de hogar, y otras que, aunque no son tan conocidas, pueden resultar de gran utilidad.
Coberturas básicas que debe incluir un seguro de hogar
Un seguro de hogar protege una vivienda, tanto en su continente como en su contenido, frente a posibles siniestros que puedan ocurrir. En una póliza de hogar, el continente se refiere a lo que es la estructura fija de la vivienda, como sus paredes, techos, suelos o la instalación eléctrica. Por su parte, el contenido incluye todos los objetos que hay dentro del inmueble, como los electrodomésticos, los muebles o la ropa.
Es importante entender que cada situación tiene sus particularidades, pero, por regla general, las coberturas más habituales que suele ofrecer un seguro de hogar son:
- Responsabilidad civil para responder ante daños personales y materiales que se puedan ocasionar a terceros, como puede ser una fuga de agua de la casa del titular que afecte al vecino.
- Cobertura por incendio, que incluye los daños materiales causados por fuego o explosión que afecten a los bienes asegurados.
- Daños provocados por el agua, como los causados por fugas o por desbordamientos repentinos.
- Rotura de cristales, por ejemplo, en ventanas, puertas, espejos o mamparas de ducha.
- Robo y hurto, que podría ocurrir tanto en el interior como en el exterior de la vivienda.
- Defensa jurídica del asegurado en su ámbito personal y familiar. Esta es una cobertura que brinda asistencia legal y representación en caso de litigios relacionados con la vivienda y, en ocasiones, otros servicios como asesoramiento legal o la gestión de reclamaciones.
- Daños estéticos que afecten a la armonía estética del conjunto, como suelos, paredes, techos o mobiliario fijo.
- Daños por fenómenos atmosféricos, como los provocados por lluvias intensas, vientos fuertes o granizo suelen estar incluidos en esta cobertura.
Aunque en España no es obligatorio disponer de una póliza de hogar, es muy recomendable contratar un seguro de hogar por todas las coberturas que ofrece.
Coberturas que no sabías que un seguro de hogar podría incluir
Junto a las coberturas básicas que habitualmente ofrece un seguro de hogar es posible que, según la póliza, se incluyan o se puedan añadir otro de tipo de coberturas menos conocidas pero igual de importantes:
- Daños eléctricos. Mediante esta cobertura es posible cubrir reparaciones o reemplazos de aparatos dañados por subidas de tensión, cortocircuitos u otros problemas eléctricos.
- Servicio de manitas o bricolaje. Incluye asistencia profesional para pequeñas reparaciones y tareas de mantenimiento en la vivienda. Es decir, que esta cobertura permite cubrir trabajos no urgentes como la instalación de cortinas, la sustitución de grifos o la reparación de electrodomésticos.
- Asistencia informática remota. Asegura recibir ayuda técnica para resolver problemas con los dispositivos informáticos sin necesidad de que un técnico se desplace al domicilio. Esta asistencia se suele realizar telefónicamente o a través de control remoto.
- Garantía de ocupación. Cubre los daños sufridos, asistencia legal inmediata, compensación por pérdida de alquileres o el pago de suministros, entre otros.
Dado que las coberturas pueden variar según el tipo de póliza, siempre es recomendable consultar los seguros disponibles y elegir aquel que mejor se adapte a cada situación.
Coberturas que puedes añadir según tu tipo de vivienda
- Para pisos. Es posible incluir las siguientes coberturas:
- Cobertura de vecinos (responsabilidad cruzada). Permite cubrir los daños causados por filtraciones de agua, tanto si provienen del propio piso como de los vecinos, siempre que se trate de un daño inesperado o accidental.
- Cobertura de asistencia con cerraduras. Existen seguros de hogar que cubren el coste de reemplazar una cerradura si se debe a un robo, pérdida de llaves o daños causados por fenómenos atmosféricos.
- Para chalets. Los chalets pueden tener como coberturas específicas:
- Daños en jardín o en piscina. Muchos seguros de hogar cubren daños a elementos del jardín o piscina, como árboles, plantas o mobiliario de exterior.
- Daños en exteriores para intentar acceder a la vivienda. Incluye los daños causados en el exterior de la vivienda para, por ejemplo, realizar un robo, como la rotura de una valla o el forzamiento de la cerradura exterior.
- Control de plagas. Aunque es una cobertura menos habitual, permite cubrir el coste de realizar un tratamiento contra una plaga de, por ejemplo, cucarachas u hormigas.
- Para propietarios de viviendas en alquiler. Las coberturas específicas para los propietarios de viviendas en alquiler son:
- Impago de rentas. El seguro permite garantizar el cobro de las rentas impagadas por el inquilino hasta el límite que se fije en la póliza.
- Defensa jurídica. Incluye el asesoramiento legal y la realización de los trámites oportunos para, por ejemplo, el desahucio o la reclamación de daños y perjuicios.
- Pérdida de alquileres. Permite cubrir la pérdida de ingresos por alquiler si la vivienda no puede ser alquilada debido a un siniestro cubierto por la póliza.
- Para inquilinos de viviendas en alquiler. Algunas coberturas pensadas para los inquilinos de viviendas en alquiler son:
- Asistencia en el hogar. Por ejemplo, a través de un servicio de manitas que permita arreglar pequeños desperfectos como enchufes rotos o fallos en el sellado de la ducha.
- Defensa jurídica. Asesora y defiende al inquilino en caso de reclamaciones o litigios relacionados con el contrato de alquiler, incluyendo reclamaciones por daños, devoluciones de la fianza o conflictos con el propietario.
- Alojamiento temporal. Cubre gastos de alojamiento si la vivienda se vuelve inhabitable debido a un siniestro.
¿Cómo comparar y elegir tu seguro de hogar?
Elegir el seguro de hogar adecuado implica analizar qué coberturas ofrece cada póliza, si se adaptan a las características reales de la vivienda y si cubren las necesidades de cada asegurado. Para ello, es fundamental comparar entre diferentes seguros:
- Revisar si el seguro cubre tanto el continente como el contenido y asegurarse de que los capitales asegurados son los adecuados, tanto para el continente como para el contenido.
- Prestar atención a los límites, exclusiones y coberturas del seguro. Podrás encontrar toda la información en las condiciones particulares, especiales y/o generales de la póliza.
- Consultar con un asesor especializado que ayude a resolver posibles dudas.
Es importante revisar de forma periódica el seguro de hogar para identificar posibles mejoras si la situación personal o de la vivienda ha cambiado.
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